La muerte es solo el comienzo

Bachira Meguru a la edad de 17 años tuvo un accidente automovilístico, apareció una camioneta fuera de control mientras se dirigía al hospital, su amada madre tenía una expresión triste y preocupada en su rostro, Bachira sabía que tal vez nunca más volvería a verla sonreír . Sonrió antes de que el camión chocara contra el auto en el que estaban.

El cuerpo de Bachira y el camionero nunca fueron encontrados entre los escombros del accidente, afortunadamente la madre Bachira sobrevivió sin un rasguño, pero con la pérdida y desaparición de su hijo, se suicidó meses después.
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Los personajes no me pertenecen.