una humana, una simple humana y estos imbeciles! se atrevian a regalarla al señor del oeste, al gran general sesshōmaru?!
-su olor me estaba volviendo loco, no se que tanto seria capaz de soportar, cuando tome conciencia de mi ya me encontraba frente a la puerta...
-eran bestias! la hermana kagome tenia razon, como podian estos seres despreciables hacer tales atrocidades.
1, 2, 3, 6... habia perdido la cuenta de los latigazos, debo resistir, tengo que escapar...
♡hola, habla la autora, espero les guste...
aunque la descripcion no esta muy bien, es un buen fanfic, se los prometo.
Donde el corredor argentino, conocido por su facilidad para chamuyar, cae ante una chica Ferrari
Donde Julieta, sin querer, cae ante el argentino chamuyero