Solo fué un momento en que se conocieron, dijo su nombre y presentó a su leal amigo y pokémon, le salvó la vida y eso fué suficiente para que tuviera especial interés en él.
Él continuó con su viaje, pero nunca dejó de observarlo, cada momento, cada sonrisa, cada aventura y batalla, siempre lo observaba, le hacia sentir euforia por el espíritu de lucha y aventura que tenía ese chico, le daba igual sus victorias y derrotas, siempre mantiene su actitud positiva, aprendía de sus fallos se hacía más fuerte y sobre todo, nunca se rendía.
Es un verdadero héroe aunque el mundo no lo sepa, es fuerte aunque pocos lo reconozcan y es valiente sin importar el oponente o riesgo, trata de proteger a los pokemon aunque le cueste la vida.
Ahora en su competencia más importante hasta ahora, es el punto decisivo de ser un Maestro Pokemon o necesitar más camino a recorrer, pero notó algo, todos los amigos y conocidos de él estaban observando la batalla, pero.... están dudando?
¿Dudan de su fortaleza? ¿Se atreven a dudar de él?
¡Eso es imperdonable!
Si tanto dudan de él, ¿Qué les parece participar en un juego decisivo final sobre el destino del Elegido?
No se vale no jugar...
Aunque....
Arceus ya ha ganado antes de comenzar.... Y reclamará a su Favorito como premio....