En Venezuela de niño me gustaba mucho andar en bicicleta en compañía de otros infantes del pueblo, y en esos recorridos al pasar el puente que está sobre el rio capa, en la vía que conduce a Canoabo con Urama, al lado derecho de la carretera, al frente del cerro del mismo nombre del rio, se veía en el paisaje un gran monticulo entre los cultivos de cítricos.
Ese monticulo que de niño visualicé corresponde a una formación circular de unos 50 metros de diámetros y unos 8 metros de alto, el mismo estaba sembrado de frondosas plantas de naranjas y mandarinas, siempre me preguntaba el como lograron que en ese cerrito se desarrollaran tan buenas plantas de cítricos, pero para la época era solo eso, nunca imaginé de que podría tratarse de algún tipo de formación enigmática.
Gracias a las tecnologías digitales de geoposición, están apareciendo en el mundo muchas estructuras piramidales como las denominadas "montañas sagradas", que corresponden a formaciones geológicas trabajadas por pueblos antiguos en donde desarrollaron viviendas ademas de recintos ceremoniales.