Samantha

La vida, la vida no es más que un sube y baja de emociones
que termina en el resultado de la muerte.
Aún me pregunto en qué momento terminé con este final tan inesperado
¿Qué nos hace tan dependientes de un otro?
Las preguntas se acumulan pero faltan respuestas.
Mi vida nunca tuvo sentido hasta que sin esperarlo apareció una luz,
una hermosa luz resplandeciente que me instó a querer salir de las tinieblas.
En ocasiones lo que uno menos espera es lo que más necesita.