El mundo de la prostitución es un lugar tenebroso y sórdido.
Eso dicen, generalizando, quienes no lo conocen por dentro. Aunque es cierto que -por desgracia-  hay mucho de eso, las negras tinieblas viven en las capas más bajas de la profesión, allí donde la trata de seres humanos, la esclavitud, las humillaciones y los malos tratos campan a sus anchas. Ese es un escenario tremendo, intolerable. Ilegal. Un inframundo tristemente frecuentado por chulos y mafias, y por mujeres -inmigrantes ilegales en su mayoría- que han sido reclutadas mediante el engaño. Importadas como mercancía a países ricos, son obligadas a ejercer contra su voluntad: horarios interminables y paga miserable. Ese terrible paisaje es el que normalmente nos muestran los medios y la televisión.
Pero, por fortuna, en esta actividad hay además otros mundos: en la cúspide de la pirámide, las prostitutas de gama alta, llamadas "escorts" (acompañante en inglés) en el argot del sector, son mujeres bellas y a menudo cultivadas. Es frecuente que tengan estudios incluso universitarios y un trabajo "normal". Es probable que utilicen solamente algunas horas al mes en su actividad del sexo de pago. Ganando en un par de días de trabajo cantidades que equivalen al salario mensual de un profesional cualificado. Eligiendo a sus clientes que son, normalmente, hombres agradables y educados que les pagan espléndidamente y las tratan como reinas. No es que lo disfruten (salvo en momentos muy puntuales) pero, por descontado, ejercen por propia voluntad. Libremente.
No es ciencia ficción. Ellas son las protagonistas reales de las historias que os voy a contar.
Arthur Zaens, un multimillonario frío y desalmado que ha vivido en la oscuridad desde la desaparición de su esposa, dejándolo solo con sus dos hijas gemelas. Desesperado por encontrar una niñera que cumpla con sus estrictas expectativas, Arthur conoce a Lía, una ex escritora y editora recomendada por un amigo. Aunque su relación comienza de manera conflictiva, con discusiones y malentendidos desde su primer encuentro en un bar, Lía se convierte en la persona que poco a poco transformará la vida de Arthur y de sus hijas, desafiando su frialdad y cambiando su mundo para siempre.