Desperté temprano para jugar con Olaf, fuimos a recoger manzanas, Anna y Kristoff habían ido a "una cita romántica", Kristoff es un buen chico, pero aun hay cosas que debe aprender para que me caiga del todo bien, en cualquier caso si Anna lo ama pues tendré que acostumbrarme.
Olaf: -¿Por qué las manzanas del piso estan tan feas?
Elsa: -Por que se calleron, se golpearon y se pudrieron.
Olaf: -¿Qué es pudrirse? Anna jamás me respon...
No puse atención, es que ahí estaba otra vez, ese viento frío y aquellos copos de nieve que caían, ¿SOLO YO LOS VEIA? ¿me estaré volviendo loca? cada vez que venia a este lugar pasaba exactamente lo mismo, estoy segura de que no lo he hecho yo, es como si alguien tuviera los mismos poderes, pero no lo podía ver quizás porque siempre estaba acompañada, ya no, mañana vendré sola y le ordenaré que se presente.