Tina había sido inducida a la relación que muchos afirmaron que era de sus sueños, Freddie era el chico que cualquier hormonal adolescente buscaba, simplemente se partía de lo bueno, era un estereotipo andante y ella lo sabía.
Pero esas mierdas de cartas y rosas, en meses se transformaron en discusiones y peleas constantes, dónde se mandaban al carajo y al otro día se entregaban el uno al otro como la primera vez. Ella lo amaba, dudo que él a ella, pero los obligaba la necesidad y el deseo de creer que todo sería como antes.
Entonces, Freddie le prometía todo lo que ella quería escuchar y en la noche eso se acababa. Su debilidad eran las mujeres, bellas y perfectas mujeres, pero Tina era a quién quería tener ahí. Él le rogaba que no se fuera, pero... ¿Acaso era justo?
¿Estaba dispuesta a sufrir por tan solo el recuerdo de tenerlo? ¿Acaso lo merecía? ¿El tiempo lo curaría todo?
Por todos los santos, tantas preguntas, tanta variedad de respuestas, tanto amor, tanto odio, tal pasión, tal rechazo...
La vida de Tina se había convertido en un bucle, un círculo vicioso del que tan solo tenía dos opciones...
Quedarse, o marcharse.
Tina decide.
( la historia tiene un montón de errores ortográficos, es el primer vistazo a la pequeña historia que he tenido en mente)
Es una historia LGTB, así que si no es de tú agrado, podes retirarte :)