Hijo de la Luna

Charlie.
Desde muy pequeño comprendí mi lugar en el mundo. Mi destino era ser la sombra de mi hermano. Él iluminaba el mundo con su presencia, tenía una habilidad natural para liderar, para ser amado por cualquier persona en el instante en el que lo conocían.

Había aceptado mi lugar como el segundo hermano, el segundo hijo, el segundo en todo. Podría ser la viva imagen de mi hermano, pero donde él era extrovertido y un líder natural, yo no podía hablar en público, era carente de las habilidades naturales de un lobo y odiaba ser el centro de atención.

Jamás pensé que mi vida cambiaría drásticamente en mi último año en la Academia. Cuando la Luna te otorga a otro macho como mate, quizá por primera vez en la historia licántropa, de pronto ya no eres invisible. De pronto, te vuelves el centro de atención.

Knox.
Mi manada me acogió cuando era un cachorro. Al igual que yo, desconocen mi origen, cuál era mi manada y por qué me encontraba a la las orillas de su territorio cubierto de tierra y sangre que no era mía.

A pesar de su benevolencia, la mayoría de los lobos me trataban como una paria. Mi aspecto les desagradaba, mi actitud tosca y taciturna terminó por aislarme de los más jóvenes.

En un intento por mejorar mis habilidades sociales, me mandaron a la Academia junto con los demás lobos. Ninguno se esperaba que mi nombre volviera a ser lo que todos susurraban, que me señalaran con el dedo y me llamaran por los peores nombres posibles. Solo que esta vez, no tenía nada que ver con mis orígenes y todo que ver con mi mate.

Tropes:
°Proximidad forzada (Forced proximity)
°BL
° Gruñón-Tímido (Grumpy-Shy)
°Hombres Lobo

Fecha de inicio: 17 de marzo