A Balto desde cachorro, siempre le gustó conocer a las personas, todo sobre ellas, sus placeres, sus alegrías, sus ambiciones, sus tristezas, sus dolores, sus preocupaciones, sus ilusiones, sus esperanzas, todo. De esta forma lo habían criado sus padres, pero un día ellos desaparecieron y Balto, ahora viviendo solo, tenía que hacer todo lo posible para proteger una sagrada cueva, antes de la llegada de el Eclipse Mágico. No hay mucho que hacer, pero si Balto tiene que dar la vida para poder protegerla, entonces lo hará. Todo sea por proteger el legado de su madre Aniu y de su padre Kitok. Incluso si su tan importante brazalete que Aniu le dejo le había sido quitado. Deberá hacer todo lo que pueda para recuperarlo. El nombre de Balto, en un idioma que solamente sus padres conocen, significa "Volar por el Aire".