Gelián era un hombre que se ganaba la vida cobrando a personas que le pedían prestado a gente incorrecta, sus grandes habilidades en las artes marciales lo hacían alguien extremadamente peligroso.
Toda una vida cultivando su fuerza y sus habilidades le dieron una muy buena reputación, pero sentía que estaba destinado a más.
Sin entender porque despertó en un lugar extraño, en donde las personas son animales, y aún más extraño, ahora era un león.
Recorriendo ese mundo se dio cuenta de la importancia que tenía el Kung Fu, por lo que entendió que llegó ahí para demostrar que era el mejor, sin embargo, las cosas no serían tan fáciles.
Enfrentando retos y a increíbles y extraños maestros, poco a poco escalaría hasta enfrentarse a su verdadero destino.
Los personajes, a excepción de Gelián, no me pertenecen a mí sino a Dreamworks.
A sus 17 años de edad y siendo rechazado por la chica de sus sueños, Nathaniel Kurtzberg pensó que nada podía ser peor, sin embargo, el destino le tenía guardado un final. Un accidente automovilístico junto a su compañera de trabajo lo cambia absolutamente todo
Adrien Agreste se estaba empezando a cansar de su vida, ¿por qué tenía que seguir llevando una de niño perfecto? Un dilema se creaba en la cabeza del rubio, que debía dejar de ponerse tantas máscaras antes de salir de su habitación a combatir el crimen.
Alix Kubdel solo tenía que hacer un trabajo grupal con Nathaniel y seguir, pintar paredes, practicar deportes extremos y sobrevivir en la escuela. No estaba preparada para descubrir secretos y verse involucrada en un mundo de héroes y villanos.
Cuando una nueva amenaza se cierne sobre París, ellos encontrarán su destino.