Con el corazón congelado y el alma en tinieblas, mostrando una sonrisa cubriendo un mar de sueños rotos. Siempre distraída, refugiada en algún libro, convencida de que el amor era solo para novelas. Hasta que llegó él: ¿Sexo o amor, qué buscaba? ¿Sería solo uno más o florecería algo más en aquel invierno constante?