... Y ahi estabas tu, una mujer soldado de 28 años trabajando en una de las fuerzas especiales mas respetadas por los aliados, y temidas por los enemigos.
La mujer de los ojos de muchos hombre y mujeres, ya sea de amor o admiración, todos sabían que eras una persona firme y amable, de buen corazón pero dura con la realidad, y eso era lo que te convertía en una persona tan especial, una persona para la que él solo tenía ojos, el te tenía en la mira, y todo gracias a esa misión.