Finnick Odair, un joven hermoso adorado por todo el capitolio, su apariencia conquisto corazones, pero su destreza en la arena termino por enamorarlos, durante los juegos era una ventaja, pero cuando terminaron se volvió una cruel tortura, nada podía ser peor es lo que creía, mientras obedeciera las ordenes de Snow, todos su seres queridos estarían bien, en especial una persona aquella a la cual cuido desde que eran pequeños, quería protegerla a toda costa, era una de las razones por las que aún vivía, su pequeña y hermosa hermana: Nerea Odiar.
16 años y su nombre se vio elegido, es como si todo estuviera calculado, un paisaje aterrador frente a sus ojos se encontraba, 120 tributos irían a la arena y dos podrían volver si así lo querían, nadie sabía que pasaría , el tormento en sus corazones crecía y la ilusión de ganar se desvanecía, ya que no sabemos si es mejor morir en combate o vivir como esclavo del capitolio.
Gi-Hun busca acabar con los Juegos, pero no sabe que In-Ho, el hombre tras la máscara, arriesga todo para protegerlo. Entre la tensión de los retos y las miradas, ambos se acercan peligrosamente, atrapados entre el deseo, los secretos y un sentimiento que podría destruirlos.