Barbara se muda nuevamente a Lisboa para acompañar a su hijo en el inicio de clases en aquel país. Aunque esta vez llega a la ciudad de una forma distinta; separada del padre de sus hijos y con trabajo en Argentina. Tanto Nicolás como Barbara liman cualquier tipo de asperezas para darle una vida de lo más tranquila a sus hijos, y por sobre todo, una familia con mucho amor.