Roseanne, una chica que siempre pone primero a los demás, así estos pasen por encima de ella, bueno, esto mientras estuvo al lado de quien decía ser su amigo.
Zyan, un chico que llegó a la vida de Roseanne para cambiarla...¿para bien o para mal?
Estos chicos llegaron a creer que eran almas gemelas, que estaban destinado a reencontrarse de alguna otra vida, tal vez una promesa rota habrá por ahí.
Vaya, en realidad estos chicos eran polos opuestos en cuestión de personalidad, introvertido y extrovertido, esto les podría traer problemas o...sentirse atraídos por el contrario, la verdad nunca se sabe.
Tienen cosas en común, como su gusto por las artes, la arte que puede hacer una, al otro se le dificulta.
-Yo te llamaba Alessia cuando aun no sabia nada, ahora te llamo Zyan por tu comodidad-
-Eres un hermoso chico, Matt
- Gracias por ser parte de mi vida...
•
•
-¿Cómo fuiste capaz de lastimarme así?-
-No me conoces tanto como ambos decimos que lo haces-
•
•
- Ya no caeré en su juego lleno de manipulación, se ve mucho mejor, lejos de mí-
~¿qué pasará con ellos?~
¿Puede una chica romántica y delicada enamorarse de alguien tan ruda como Lynn Loud? Issabella Abrams era esa chica: amante del color rosa, del maquillaje, la poesía, y de las historias de amor. Todo lo contrario a Lynn Loud, quien prefería la acción, los deportes y no se preocupaba demasiado por lo sentimental.
A pesar de sus diferencias, había algo en Lynn que atraía a Issabella. Tal vez era su valentía o su determinación, o quizás el hecho de que Lynn no temía ser exactamente quien era. Mientras que Lynn también sentía cierto interés en Issabella, no entendía como no podía tentarse en ganar y ser la número uno, veía que ella era como una suave brisa que acariciaba el rostro hasta de quien no merecía con dulzura, dulzura que raramente a Lynn le encantaba.