En un rincón olvidado del Borde Exterior, más allá de las rutas espaciales conocidas, yace un sistema solar solitario que ha escapado por siglos del radar de la República Galáctica. En él, en un planeta denominado Tierra, vive Lincoln Loud, un niño de 4 años con cabello blanco y una chispa especial que brilla más allá de lo visible. Es el hijo mayor de Rita y Lynn, quienes lo tuvieron cuando aún eran adolescentes tontos, creyendo que no pasaría nada. Dos años más tarde llegó Lucy, su hermanita de apenas 2 años, una niña completamente normal, sin conexión alguna a la Fuerza, pero con una sensibilidad única hacia el mundo que la rodea.
Un día, el Maestro Jedi Tal-Ken detecta una perturbación extraña en la Fuerza proveniente de este sistema remoto. Siguiendo su intuición, aterriza en la ciudad de Royal Woods, donde identifica a Lincoln como el foco de aquella energía. Durante su encuentro con la familia Loud, el maestro levanta un sillón con la Fuerza frente a los ojos incrédulos de los padres, como prueba del poder que habita en su pequeño hijo.
Rita y Lynn se enfrentan a una decisión desgarradora. El Maestro Jedi promete cuidar a Lincoln como si fuera suyo, formarlo y protegerlo