«Los duraznos floreciendo la lluvia hizo caer los pétalos me miro al espejo y no me reconozco.» María Guillén ❀┅❀┅❀❀┅❀┅❀ «Sus ojos eran azules, tan azules como el color del mar con el que creció toda su vida. Su piel era clara, como la porcelana más fina, y su cabello era del color del oro, con rizos que solo había visto en la orilla de ríos, o enredaderas de arbustos con flor y espinas; sus labios eran rosas, como las flores de duraznos, y en sus mejillas, puntos de estrellas estaban salpicados con el color de la tierra. Era hermosa. Pero el rojo de la sangre, salpicando su vestimenta y partes de su piel, solo hizo resaltar cada una de sus diferencias, y él sabía que tal magnificencia no pertenencia a su corte.» NO COPIAS NI ADAPTACIONES.