Esta es una traducción, créditos a messymiso en ao3
Dicen que es repulsivo. Anhela ser escoria.
Keishin está condenado a sufrir. Está convencido de su destino. Hasta que recibe una llamada telefónica.
Cae tan rápido como un cuerpo desde el balcón, pero el dolor de los huesos al romperse en pedazos sobre el duro asfalto y el nauseabundo hedor de la sangre que se escurre lentamente de su cadáver, empapando la calle de un brillante carmesí, es demasiado para él. manejar. Duele.
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pueblerino; O la historia de cómo Keishin aprende a dejar de rezar y empezar a tomar.