Jimin un joven estudiante de danza contemporánea que cae por error en manos de quien menos imaginaba un empresario corrupto y conocido por todo el mundo su nombre resonaba hasta debajo de las piedras una fiesta con su amiga cambiaría su vida totalmente cayendo ante los pies de el chico de traje negro, un traje echo a medida que le quedaba jodidamente bien era como ver a el mismísimo Lucifer vestido con ese traje negro, su piel pálida, su cabello negro azabache, sus ojos esmeraldas eran tan hermosos y penetrantes que entraban hasta lo más profundo de su alma causando un delicioso escalofrío, sus manos grandes y huesudas con esas venas saltantes le daban un aire tan seductor y esos labios finos con un tono rosa, ese hombre..era el mismísimo Lucifer en persona solo lo tentaria a pecar xx-tu inocencia enloquece al lobo hambriento que vive en mi...tu serás mi presa y yo seré tu cazador, hoy tomare a mi presa para saciar mi hambre, eres mi presa desde hoy ¿okey? _mencionó tomando su mentón alzandolo un poco jodida vista tenia_ xx_pregunté...okey? _mencionó leve apretando su barbilla mirando fijamante esos ojos color miel_ nh:si mi señor...seré su presa por esta noche _mencionó sin saber que acababa de firmar un contrato con el mismísimo diablo..y era inevitable que alguno de los dos no saliera herido_