Akaza un adolescente de 17 años que estudia en el instituto kimetsu, tiene un admirador secreto quien siempre le deja cartas y ramos de rosas a la mesa de su sala, quien es el tal "admirador secreto"
Claro le preparo chocolates y todo eso, aun sabiendo todo el dolor que guardo desde el año pasado, cuando cada que se lo encontraba llamaba su atención, ya que era del consejo estudiantil, casi se quedaba todos los días castigado, intentaba disimular, pero cada que Kyojuro dirigía su mirada asía otro lado él lo observaba a detalle sonrojándose en el proceso.
- *suspiro* pero eso fue el año pasado - suspiraba tranquilamente mientras recordaba los acontecimientos de hoy, no podía creer que le dio su número a Rengoku, tenía millones de preguntas:
¿será que su ser amado quiere estar con él? o ¿sería de nuevo la misma desilusión amorosa que sufrió aquella vez, cuando su corazón palpitaba fuertemente mientras llevaba en sus cálidas manos un ramos de flores junto a la carta más hermosa que el mundo podía obtener, para poder ver por sus hermosos y puros ojos color ámbar, que el amor que creció, floreció como un cerezo gracias a una llama caliente, que provenía de los grandes cumplidos que le decía ese chico de cabello cuya llama brotaba desde sus puntas, se extinguió en un abrir y cerrar de ojos, como si la misma llama, lo habría quemado hasta las raíces?
Se desplomo inconsciente al suelo.
- El amor florece como lindas flores en primavera, pero si la descuidas puedes hacer que esa persona a la que te trataba tan bien te olvide, que...siga con su camino, hasta que tu...te des cuenta que...necesitas de esa persona, pero...ella...ya no está interesada en ti...te olvido, no puedes remediarlo...Kyojuro te lo diré una vez fuerte y claro, el si te quería, pero lo lastimaste - esas fueron las palabras de Douma, esperando pacientemente en el hospital.
Camila, una chica totalmente común y corriente, estudiante de diseño y modelo en sus ratos libres, acompaña a su padre en un viaje de trabajo en el que su vida da un giro inesperado al tener que convivir con el nuevo icono argentino, Franco Colapinto.
La distancia, la fama, la reputación de ambos, serán estos y más los obstáculos que deberán afrontar a lo largo del tiempo si es que quieren mantener algo más que una simple amistad.
"No sabes lo loco que me vuelve tu forma de ser."