Está comprobado que tu mente siempre intentará protegerte, bloqueara todos esos recuerdos a los que llamamos traumas, buscará aliviar y hacer que el dolor sea más fácil de tolerar.
Muchos te dirán que olvides tu pasado y te concentres en el presente, que los buenos recuerdos siempre prevalecerán y serán más fuertes que cualquier mal momento, dirán que de tí depende liberarte del pasado, pero eso solo lo dicen los que no han conocido el verdadero dolor ...
Aquellos ignorantes del dolor ajeno, ¿qué haces si jamás tuviste buenos momentos? ¿Qué pasa si esos buenos momentos se vuelven malos cuando te arrebatan a las personas con las que los viviste? ... ¿cómo te deshaces del pasado, si es tú presente?.
El pasado nunca se va, le encanta esconderse entre la gente, la música, los sueños e incluso los más bellos recuerdos, es fácil decir nunca más ... pero al final, volvemos a caer.
¿Cómo sales a flote, si has olvidado hasta como respirar? ¿Cómo vivir sin ninguna razón? vivir entre mentiras es para los que temen sufrir y prefieren olvidar, pero yo ... yo no puedo olvidar, jamás podría olvidar que mi madre lo dio todo por mí, jamás podría olvidar que mi padre acabó con una parte de mí, me niego a olvidar, me niego a vivir engañado.
Me niego a vivir en el mundo de las felonías aun cuando sean inocentes.
En este mundo tan cruel, tan falso ... no pienso seguir dejando que mi destino lo decidan los demás, estoy harto, no quiero aparentar ser bueno, la bondad no te sirve de nada.
La justicia es una maldita perra que jamás llega a quienes la necesitan, eso lo confirmaria más tarde por desgracia.
Historia +16 ya que contiene temas un tanto sensibles.
100% de mi autoría.
Representación LGBTIQ+
Si no te gustan este tipo de cosas, no estas en la obligación de leerlo.
Es un borrador.
Todos dicen que la familia es lo más importante en la vida, pero ¿qué tal si no es así? la familia puede ser tu peor enemigo, aquel que conoce todos tus puntos débiles, te crean traumas y dolores. Y por ser un inocente que no querían, te echan la culpa de todo, sin importar si eres inocente o no. Por más que huyas de aquellos que te hicieron daño, los fantasmas del pasado te asechan, repites la misma rutina una y otra vez siendo consiente o no de ello, intentas cambiar, darte amor propio, pero al ser algo que nunca te dieron te es imposible demostrarlo por miedo a que te lastimen de nuevo.
Tu familia es aquella que haces en el camino, no siempre los lazos son necesarios, siempre y cuando allá eso que jamás te dieron, tendrás un lugar al que puedas llamar hogar. Llenos de recuerdos amargos y dulces tratan de enmendar sus heridas, sanando y curando cosas que no rompieron, pero a veces las jugadas del destino son por algo y por más que te quieras alejar de él, de alguna forma u otra tu destino debe cumplirse.