Justo ahora, a Hinata sólo le gustaría sentir nuevamente esos toques y caricias fortuitas que aquel muchacho prodigó gustosamente sobre él. No habían pasado ni 20 minutos quizás, pero después de conocer esa nueva forma de comunicación por parte de Kageyama, Hinata se sentía falto de algo importante. Esos tenues cortos de electricidad que corrían desde la punta de sus dedos hasta la última hebra de su enredado cabello. Después de conocer esa entrega de afecto tan repentino, ¿cómo podría seguir fingiendo que no la necesitaba desesperadamente? ° "Kageyama sintió ganas repentinas de sonreír, pero se contuvo. ¿Él consiguiendo el silencio de Hinata mientras lo alimentaba con sopa? Definitivamente algo de locura. Y sin reparar a tiempo sobre el curso de sus pensamientos, mucho menos de su boca, habló sin pensar. -Quiero cuidar de ti, boke."
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