La aparición de Hawk Moth, Ladybug y Chat Noir marcó el inicio de una nueva era: la humanidad despertó el Maná, una fuerza interior que dio origen a la magia. Donde antes reinaba la ciencia, ahora la sociedad se transformaba en torno al poder mágico. La política, la economía y hasta las relaciones personales se medían por la cantidad y calidad del maná, y quienes carecían de él eran considerados reliquias inútiles de un pasado superado. Apenas un 0.0001% de la población nació sin poder, y entre ellos estaba Chloé Bourgeois.
Hija de una familia adinerada y poderosa, Chloé pasó de ser la niña arrogante que desfilaba con orgullo por París a un blanco constante de burla. Sin maná, su nombre se convirtió en una mancha en el prestigioso linaje Bourgeois. Para ocultar su debilidad, adoptó una fachada de superioridad y desprecio, burlándose de otros y fingiendo fortaleza, mientras el vacío de sus manos vacías ardía en su pecho cada vez que intentaba conjurar magia.
La presión del mundo que la rechazaba la llevó a un error que cambiaría su vida: durante una noche de rebeldía, quedó embarazada. La noticia escandalizó a los Bourgeois más por las apariencias que por su bienestar, y la alta sociedad encontró en ella un nuevo motivo de burla. Prisionera de la vergüenza y de su familia, Chloé tomó la decisión desesperada de huir de París, desapareciendo sin dejar rastro.
Aunque encontró refugio lejos de la ciudad y comenzó a reconstruir su vida, el pasado nunca desaparece. París seguía preguntándose qué había sido de ella, mientras viejos enemigos y curiosos buscaban descubrir la verdad. La sombra de su linaje y su antigua vida amenazaba con alcanzarla, recordándole que, aunque huyera, nunca podría escapar por completo de lo que fue.
En el momento final antes de su destrucción, Wanda Maximoff -la Bruja Escarlata- es arrastrada hacia un vacío más allá del tiempo y la forma. Perdida en el abismo de su culpa, una luz misteriosa la toca... y la devuelve. No a su mundo, sino a otro. Uno donde la magia es distinta. Donde la redención podría tomar forma: el mundo de Harry Potter.
Cuando una figura luminosa -una cierva- le muestra los recuerdos de un niño abandonado y maltratado por sus parientes, Wanda comprende su nuevo propósito: proteger al hijo de Lily Potter. Aunque no sabe por qué fue elegida, acepta el trato. A cambio de una oportunidad de redención, cuidará del pequeño Harry.
Pero Wanda no es una bruja común. Y este mundo no está preparado para ella. Desde el primer momento en Privet Drive, los Dursley sentirán que algo ha cambiado.
Con poder, determinación y una compasión creciente, Wanda enfrentará un nuevo destino. Porque esta vez... nadie tocará al niño sin enfrentarse a ella.
Después de todo, ¿quién mejor para proteger al Niño Que Vivió... que la mismísima Bruja Escarlata?
Nota del autor/a: Esta historia está libremente inspirada en la premisa inicial de Strange Potter, una obra que admiro profundamente y que fue una chispa creativa para desarrollar este proyecto. Aunque la trama, el desarrollo de los personajes y los eventos son completamente originales y distintos, considero justo reconocer esa inspiración inicial.
Asimismo, se trata de un fanfic sin fines de lucro que fusiona elementos de los universos de Marvel y Harry Potter, cuyos derechos pertenecen a sus respectivos creadores y propietarios (Marvel/Disney y J.K. Rowling). Esta obra está hecha con respeto y con la intención de rendir homenaje a estos mundos que tantas personas hemos disfrutado.