Como regla general, los gatitos híbridos son pequeños y desinteresados en lo que otras personas quieren que hagan, un poco malvados y al menos un poco manipuladores. Louis se enorgullece de ser todas esas cosas en diversos grados, pero especialmente de no estar interesado en lo que otras personas le dicen que haga. Todavía es un maldito humano, a pesar de sus orejas puntiagudas y su afición por acurrucarse al sol y tomar siestas. Se ocupa de sus asuntos diarios, derribando cosas donde le parece conveniente y dejando un rastro de desorden a su paso. A pesar de lo exasperado que hace que Liam ya se haya acostumbrado, ya que ha compartido piso con Louis durante casi tres años, y si Louis se queja lo suficiente, incluso limpiará lo que ensucia. Es una gran vida, de verdad. Con la excepción del compañero estúpido, ancho de hombros y demasiado grande de Liam, el que siempre viene a ver deportes con él. Louis odia a ese tipo. Su cabello siempre está grasiento y cuando viene trae una extraña cerveza hipster que sabe a mierda. Y ni siquiera dejará que Louis tenga nada de eso, tampoco. La única razón por la que Louis sabe a qué sabe es porque una vez robó una botella del refrigerador y huyó a su habitación antes de que Harry pudiera atraparlo. - (ht) © whoknowsAll Rights Reserved
1 part