El tranquilo y pintoresco pueblo de Hazelwood se encuentra anidado en medio de un frondoso bosque, rodeado de imponentes árboles que se alzan hacia el cielo. El aire fresco y limpio se impregna con el embriagador aroma a pino y hojas húmedas, creando una atmósfera serena y acogedora. A lo lejos, majestuosas montañas se alzan, formando un impresionante telón de fondo que realza la belleza natural de este lugar.
Las casas de madera, con sus encantadores diseños, se distribuyen alrededor de la plaza central, donde destaca la antigua iglesia del pueblo, testigo silencioso de generaciones pasadas. El sonido apacible de un arroyo cercano se escucha débilmente, añadiendo un toque de serenidad a la escena. Aquí y allá, algunos animales salvajes se asoman entre los árboles, disfrutando de la tranquilidad que envuelve el lugar.
Sin embargo, detrás de esta fachada apacible yace algo oscuro y misterioso. Aunque pocos habitantes de Hazelwood son conscientes de ello, los eventos inexplicables que se ocultan en los bosques que rodean el pueblo son indicios de algo realmente perturbador. Rumores de criaturas extrañas acechando en la oscuridad, luces intermitentes que aparecen y desaparecen en la noche, y voces susurrantes que se arrastran en la brisa fría han empezado a llenar de inquietud a los residentes.
Es en este escenario que un grupo de jóvenes, sedientos de aventura y ansiosos por desentrañar los secretos ocultos de Hazelwood, deciden adentrarse en lo desconocido. Atraídos por el misterio que envuelve al pueblo, se embarcan en una peligrosa búsqueda en busca de respuestas. Sin embargo, pronto descubrirán que se están enfrentando a algo mucho más grande y siniestro de lo que jamás imaginaron.
Hay reglas en el mundo que debes cumplir. El deber de servir y complacer, dar y recibir.
Soy Stella Miller, una mujer firme y con decisiones. Nadie puede sobrepasarse conmigo si no quieren morir en garras de él.
Mí amado esposo, el hombre fuerte y delicioso que siempre está a mis pies, al único que me pondría de rodillas y al único que acariciaria de manera perversa y coqueta...
Y mucho cuidado con las cosas que dicen de mí, porque soy una chica. Más conocida como la mujer del Diablo.