La vida siempre tiene improvistos. Muchos de ellos suelen ser momentáneos, situaciones que son resueltas en cuestión de segundos y minutos, sin embargo, están aquellos que continúan por horas, días, semanas, meses, años y así hasta que terminen. Ser arrastrado fuera de tu propio mundo a otro para cumplir el capricho de salvarlo con la creencia de que al final todo volvería la normalidad. Cuando todo termino no fue como se esperaba y al viajar nuevamente estás en otro sitio sin el descanso anhelado, no obstante por lo menos nadie espera nada de ti y puedes estar tranquilo de que el mundo está a salvo, ¿verdad? La imagen de portada no me pertenece. Terraria y Danmachi no son de mi propiedad.
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