"Ese peso, ese inevitable peso. La ahogaba, se imaginaba como seria ser salvada, no sentir esa presión en su pecho. Pero a la vez, desconocía como sería estar en un mundo donde esos recuerdos no la gobernaban. Porque entonces, se sentiría ajena, ajena a algo que jamás experimentó. A veces, las cicatrices duelen más, porque recuerdan diariamente y agobian de que no tuvo la capacidad de hacer mas para evitar tan terribles experiencias."