Nadie puede vivir sin él amor, pero tampoco podemos vivir sin odio. Pues el odio y el amor van de la mano. A veces lo que se hace llamar amor nos lastima y nuestro corazón creo una barrera instantánea compuesto por el odio que quisiéramos sentir por esa persona que nos lastimo. Aunque en el fondo esperamos novyener que odiarlo para toda la vida. Pero, ¿Que es el amor sino el deseo desesperado de encontrarnos a nosotros mismos? Antes de encontrar a otros, debemos encontrarnos a nosotros primero.