- Esto es un contrato, no tienes derecho de meterte en mi vida - grite furiosa -
- Claro que si nena, quieras o no legalmente estamos casados - Guiño su ojo y se fue-
Nos metimos tan hondo, que ni el infierno se animó a echarnos.
-Nos van a matar, Enzo...
-Entonces que nos maten, pero con vos al lado, no me arrepiento de nada.