Las cosas, ¿son lo qué parecen? Un pequeño príncipe, tan lindo, inocente y adorable, con un corazón lleno de amor y alegría.
Era la alergía de su reino, todos lo amaban, ¿verdad?
Todos amaban a sus padres, ¿cierto?
Su pueblo estaba feliz, ¿no?
Es decir, todo parecia estar bien siempre, cuando su padre lo llevaba a ver el pueblo todos le trataban bien...Solo una vez, parecio ser que no todo estaba bien, pero solo fue una vez, ¿no es cierto?
Lamentablemente, nuestro pequeño príncipe va a tener que aprender que no todo es luz, que también existe la oscuridad, y también un gris en este mundo.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
A ver que sale de esto :^
Rezando pa' que no morir sin que nadie lea eto' :')
Al defender a su familia de un asaltante y morir, Alicia es transmigrada a un mundo del matriarcado, donde las mujeres son el pilar y las que mantienen a la familia, mientras los hombres son los que se quedan en casa.
Lo más sorprendente para Alicia no es el sistema en el que se rige la sociedad, los hombres, que no solo son los que dan a luz, si no, que se dividen en dos.
Los oro, la clase baja que tienen tendencia a dar a luz a otros hombres.
Y los jade, la clase alta que tienen tendencia a dar a luz a mujeres.
No solo eso si no que al ser las mujeres un bajo porcentaje, las familias se conforman por un harem de hombres, los cuales no son vistos más que como máquinas de hacer bebés.
La imagen la saque de internet créditos de la imagen a: "Alya".