Si me dijeras que estaría viendo su pecho moverse despacio con su respiración tranquila, que su mano estaría abrazando mi mano, que su melena estarían descansando en mi almohada mientras estoy atenta cuidando su sueño, que sus piernas están entrelazadas con las mías porque le dio frío, que cuando me alejo su mano me aprieta para que me quede quieta, que aquella voz que me negué a amar ahora me enamora cada vez más cuando me dice "buenos días", si me dijeras todo eso antes, entonces... -¿Piensas en mí? Sonreí al escuchar su voz adormilada mientras sus ojos batallaban por verme. Me acerqué hasta juntar nuestras frentes y la vi sonreír entre medio de un suspiro. -Quizás. **En constante edición porque la dislexia y dispersión a veces me ganan**