NUNCA ES TARDE PARA IRSE (amarte o amarme)

Se dice que los polos opuestos se atraen y que es la combinación perfecta para que dos personas estén juntas, puede que sea verdad, quizá es a lo que llamamos el complemento perfecto, pero hay que recordar que las diferencias que pueden llegar a unirte a una persona también tiene el poder de separarte de ella, pero nada está escrito, todo debe vivirse para conocer las respuestas de dichas incertidumbres.

Dos jóvenes descubriendo lo que es la vida, con ideales y perspectivas muy diferentes de la misma, pero dispuestos a dejar fluir los momentos que se les presenten y descubrir más de ellos aunque pueda que no todo sea como lo esperan.

Atlas y Tabatha han coincidido más de lo que ellos se imaginan, pero no es hasta su último año de universidad que de verdad deciden ser cercanos y comenzar una historia de la cual cada uno tendrá perspectiva del impacto que tiene el uno del otro en su vida. Lo que es claro es que una colisión los espera, Atlas es el chico que puede socializar de manera espontánea, no es de muchas palabras pero aun así busca tener momentos simpatizantes con las personas y por otro lado Tabatha es más reservada, no le gusta hablar más de lo necesario con personas que no son cercana a ella, pero aun con esa primer diferencia ellos logran tener ese primer acercamiento que designará el inicio de su historia.