La Divinidad es el nombre con el que se conoce a los dioses , los primeros seres en poblar el universo . Poderosos , eternos y caprichosos seres a los cuales pronto la longevidad comenzó a parecerles demasiado aburrida . Entonces crearon un planeta , La Tierra y lo llenaron de criaturas que imaginaron opuestas a ellos : diferentes todas ellas , mortales todas ellas , predecibles , manipulables y obedientes ; los humanos .
Pero los humanos resultaron más interesantes de lo que La Divinidad esperaba y pronto los dioses comenzaron a ver en sus creaciones más que meros juguetes ,comenzaron a amarlas y de ese amor nacieron nuevas razas , ni humana , ni divina .Algunos eran criaturas deformes y raras ,espeluznantes que fueron desplazadas al fondo de la tierra , sepultadas en abismos y las llamaron " demonios " y estaban las que parecían humanas pero poseían una belleza inaudita ,superando incluso la divina .Estos heredaron la eternidad de sus padres , poderes indescriptibles y un grupo dentro de ellos ,la capacidad de transformarse en diferentes formas de vida , aunque era sólo propio de un grupo reducido que mostraba una rara conexión con la naturaleza. Sin embargo también poseían todas las emociones humanas en su máxima expresión ,amaban más ,odiaban más ,deseaban más . Pronto los humanos temieron a esta nueva existencia ,tan bella y poderosa como un dios ,pero con los retorcidos defectos humanos . La Divinidad no quiso que esta especie hermosa y poderosa terminara encerrada como los demonios , sólo a esta especie la consideró hija suya y sólo para esta creó un nuevo mundo a espaldas de la raza humana , Guindell, existiendo en paralelo a la Tierra ,oculto de ella , este fue el hogar de aquellos seres bellos a los que llamaron " celestiales " .Así crearon la armonía en su propio mundo , sus propias razas , sus propias leyes .
Lin Yi, un trabajador de oficina muy trabajador, murió una noche por exceso de trabajo. Cuando abrió los ojos de nuevo, se encontró en el cuerpo de un personaje que había sido carne de cañón y que había sido casado con un magnate como parte de una alianza comercial entre dos familias adineradas.
En este matrimonio, Lin Yi era prácticamente invisible. Su dominante marido nunca volvía a casa, dejándole sólo una asignación mensual de cinco millones de yuanes.
Lin Yi: ¡Qué buena oferta! ¡Es hora de vivir la vida como un adicto al sofá!
Aparte de eso, Lin Yi también tenía un hijastro llamado Huo Mianmian, un niño de tres años que era pequeño, suave y hermosamente refinado. Sin embargo, el niño generalmente era muy tranquilo y cauteloso con los demás, no se acercaba fácilmente a nadie.
Lin Yi no tenía que preocuparse por criar al niño, disfrutaba de su nueva libertad, su única preocupación era cómo gastar su dinero.
Cuando estaba feliz, compraba un inmueble comercial; cuando no estaba feliz, un coche deportivo...