_Padre -el joven extranje que entraba al confesionario y se sentaba con rudesa menciono a el padre.
_Dime hijo, aqui estoy para escucharte- hablo el anciano caucasico ya con canas en su cabello se sentaba cuidadosamente.
_Epecado padre. Suspiro pesadamente mientras sujetaba sus cabellos rubios cual sol- _Eh roto el décimo mandamiento padre...
El padre suspiroy con una vo serena le dijo-_Has codisiado la mujer de tu projimo, hombre!! que te a hecho codiciarla ? Pregunto el padre tomando su rosario-_Que te a hecho cometer semejante pecadi?
_Hay padre, si usted la viera...-el sonrio recordandola-_ esos ojos verdes, su sonrisa tan encantadora y lo altanera que no se lo quita nadie y esa voz...
_De ángel -dijeron al unisono, el padre calló por un momento.
_Alejandra...Hijo, no eres el primero en caer por esa mujer...Venida desde el Sur del continente y del oriente de su país...hijo rezale a Dios para que te libre de su voz - Dice el padre antes de salir de el confecionaria y dejando solo a el inglés que al igual que la oriental era forastero en esa tierra.
_Mi Alejandra...Mi pecado