"¡Me mordieron!" Nirvana gritó sintiendo a su corazón acelerarse con cada segundo que pasaba. Joel agarró con fuerza el brazo de la niña y efectivamente, estaba infectada. Sin dudarlo, él apuntó a Nirvana con su escopeta dispuesto a matarla. Sin embargo, no pudo apretar el gatillo, no era capaz de matar a lo único que lo mantenía cuerdo en esos momentos.