La jaula de oro... No deja de ser prisión.

Kim HyungJun jamás fue un angelito, era un rey como uno de los CEO del mayor banco de corea, tenía más carácter y astucia que muchos de los hombres que conocía, y ninguna de sus relaciones llegaba a nada serio. Quizás por eso conocer al Director de Crimen Organizado de la CIA fue algo tan memorable.

Park JungMin era un hombre que no se andaba por las ramas, un luchador nato y la vida para él era una eterna guerra que debía ganar. En eso los dos se parecían demasiado, y por lo que fue un momento mágico, el hechizo perduró.

Pero eventualmente tenían que salir de la cama. ¿Qué pasará cuando sus trabajos y sus vidas colisionen de frente? ¿Qué es lo peor que puede suceder cuando el CEO de un banco de un paraíso fiscal se enamora del encargado de perseguir a todos sus clientes?

Traiciones, mentiras, desengaños, errores que no pueden perdonarse porque al final de todo, el amor no es más fuerte que los barrotes de una jaula de oro, no dejan de ser prisión.

Esta novela no es mía, todo los créditos al autor original.
Solo la adaptación es mía.

Esta es la cuarta parte de la saga:
"Todo por una, ¡piadosa mentira!"