"𝐻𝑒 𝑣𝑒𝑛𝑖𝑑𝑜 𝑝𝑜𝑟 𝑞𝑢𝑒 𝑒𝑠𝑐𝑢𝑐𝘩𝑒 𝑡𝑢 𝑐𝑜𝑟𝑎𝑧𝑜́𝑛 𝑑𝑒𝑠𝑑𝑒 𝑚𝑖 𝑝𝑙𝑎𝑛𝑒𝑡𝑎, 𝑡𝑢 𝑎𝑙𝑚𝑎 𝑎 𝑟𝑒𝑠𝑜𝑛𝑎𝑑𝑜 𝑎 𝑡𝑟𝑎𝑣𝑒́𝑠 𝑑𝑒 𝑚𝑖𝑙𝑙𝑜𝑛𝑒𝑠 𝑎𝑛̃𝑜𝑠 𝑙𝑢𝑧 𝑦 𝑙𝑜𝑔𝑟𝑒 𝑒𝑛𝑐𝑜𝑛𝑡𝑟𝑎𝑟𝑙𝑜, 𝑝𝑜𝑟 𝑓𝑎𝑣𝑜𝑟, 𝑛𝑜 𝑚𝑒 𝑒𝑐𝘩𝑒𝑠" El sueño Americano, habían dicho, todos los mexicanos cumplían sus sueños cuando llegaban a Estados unidos, cumplen sus metas y demás, pero parece que te tiene un plan horrible para el resto de tu vida, empezando por que no eras mexicana y que eras de un pueblito de dónde vienes, donde el dinero se tenía que conseguir vendiendo tu cuerpo o regalando tus órganos. Con un trabajo mediocre en Nevada como camarera, un remolque antiguo como casa y pronto a cumplir 30, encuentras a un hombre semi desnudo caminando en la carretera, y ¡Dios, es tan hermoso! ¡Y tiene poderes!