Cuando la noche cae y cierro mis ya cansados ojos, mi mente solo me lleva a un lugar, a un recuerdo, vuelvo al mismo sueño otra vez...tu rostro, tus manos, tus ojos, tus labios, tu voz me llama y me indica el camino directo hacia el mar. Pensé que tú serías mi salvación, creí que esta historia no tendría un fin, porque tú y yo nos veíamos sin un fin. Tú eras mi eunoia, lo eras todo para mí... Entonces por qué...? desde cuando tu mirada se volvió tan fría, y tus toques ya no son para sanar las cicatrices de mi cuerpo, en que momento apartaste mi ser que solo giraba alrededor tuyo... Nadie quiere ser amado por mi y a nadie le interesa el dolor que tanto a estado guardando este pequeño corazón, las lágrimas me ahogan y siento que falta poco para rendirme dando mi último suspiro...