Al momento de casarse uno espera una magica velada, rodeado de sus amigos y familiares, bailar con cada uno de ellos y en especial con esa persona con la que decidiste unir tú vida por el resto de la eternidad. Claro que esto no es más que un clásico modelo de felicidad inculcado por los cuentos de hadas, ya que existen muchos matrimonios, entre ellos los acordados por conveniencias, donde dos personas que no sienten el mínimo amor el uno por el otro se unen para beneficio de terceros o para el suyo propio.