En el año 2021, Sergio llegó a la escudería de los Toros Rojos. México, feliz de que el piloto que vio nacer logró "dar el paso más grande de su carrera en la F1". Así lo pintaban los medios internacionales y la prensa local, pero más que nada, la prensa de Guadalajara, que estaba más orgullosa que nunca de Checo, lo enaltecía, diciendo cosas para hacer ver a Pérez en lo más alto, como "Checo es el mejor piloto de la historia de México" "Checo va a lograr grandes cosas con Red Bull" "Checo va a saber lo que es ganar y ser grande". Pero lo que no contaron ni la prensa, ni Sergio, es que tenía un obstáculo, un piloto nacido en los Países Bajos, llamado Max Verstappen, un piloto como pocas veces se había visto en la historia reciente de la Fórmula 1, que no le haría la vida fácil a Checo en sus primeros meses en Red Bull. Después, la historia daría un giro totalmente inesperado, cambiando de una historia de odio entre el mexicano y el neerlandés, en una historia llena de emoción y dramatismo.