Todas las chicas soñamos con ese chico que con solo sonreírnos nos haga sentir amadas. Soñamos con estar con ese chico que nos lleve a la luna con un beso. En los libros siempre vemos que las chicas nos enamoramos de los guapetones de la clase, los populares e incluso de aquellos que con la mirada nos dicen peligro. Yo siempre he amado leer y como toda adolescente -virgen por cierto- soñaba con tener una vida como la de mis libros. Hasta que estuve con él, Kevin Brown. El chico más guapo de la escuela, hijo de padres ricos y capitán del equipo de básquet. Un cliché total, lo sé. Pero no todo fue color de rosas, me usó, me quitó lo más preciado y reservado que tenía y de ahí mi vida fue diferente. Mi vida era tranquila, depresiva y sola...sin contar a mis mejores amigos. Hasta que tuvo que entrometerse alguien, alguien tan odioso y extraño como.... Joder, mi vida ahora está patas arriba por él. Estúpido detallista del demonio.