Azufre a Medianoche [Relatos Cortos]

Cayó la noche, y con ella, caes tú y los pensamientos negativos se apoderan de ti. ¿Sobreviviré a una noche llena de dudas, miedos y devastación?

Toma asiento y tápate con la manta más calentita que tengas, porque la noche no tiene tantas horas como el día, pero si no duermes será muy larga.

Ya cuando te levantes por la mañana, serás salvado por el arrebol y el olor a canela de la suerte y el desayuno.

Para huir y arrancar esos ojos que juzgan. Historias que no tienen un final feliz. En este lado de la humanidad, entendemos que soledad huele a azufre y el abandono a humedad.
La desesperanza se hizo persona y se presentó ante ti. Era medianoche y tus lágrimas no te permitieron verle la cara con claridad. Solo un humano puede disfrutar hiriendo a otro.

La muerte.