«-Mas te vale que siga así -deslizó los dedos hacia arriba por la espalda de James hasta llegar a su cabello y luego tiró duro-. No quiero a ninguno de tus perritos falderos metiendo la nariz en mis asuntos. James sonrió con picardía, sus ojos fijos en los de Snape. -¿Ahora soy tu asunto? ¿No era solo un polvo rápido la última vez que cogimos? -No quiero que la población total de Hogwarts sepa a quien me llevo a la cama, no te creas tan importante. -Tú y no nunca hemos tocado una cama. Escritorios, paredes y muebles abandonados, por otra parte... Snape acercó a James con otro tirón en el pelo y mordió con saña su labio inferior, antes de empujarle la lengua por la garganta. Esa era su forma de dar por cerrado el tema y James estaba más que encantando de dejase llevar por tan interesante distracción.» O: Un encuentro nocturno entre James y Severus.