Te amo entre todas las Fronteras

En un mundo donde las alianzas se forjan con promesas rotas y los corazones cargan con siglos de historia, Dinamarca siendo hielo que arde. De mirada violeta y alma serena, es esa clase de mujer que todos desean, pero pocos se atreven a tocar. Su presencia impone sin esfuerzo: elegante, inteligente, con una voz suave que puede calmar tormentas o declarar guerras. Todos la quieren cerca, pero ella, con un corazón noble y reservado, sólo entrega lo que cree que es justo... y casi nunca es amor.

Guarda una ternura profunda, pero la ha enterrado bajo capas de diplomacia, orgullo y cicatrices. Ama con fuerza, aunque no lo admita. Cuida a los suyos con un amor feroz, pero nunca lo presume.
Mientras Cuba es fuego encerrado en un cuerpo que aprendió a no confiar. De mirada intensa y sonrisa rara, guarda sus emociones como si fueran secretos de Estado. Es orgulloso hasta el extremo, terco como la tierra que lo vio nacer, y tan egoísta que a veces prefiere arder solo antes que pedir ayuda. Habla poco, pero cuando lo hace, sus palabras cortan o encienden. No da nada gratis, ni su cariño ni su historia.

Atractivo por naturaleza, tiene ese encanto peligroso que hace que muchos lo deseen y pocos lo comprendan. Para el mundo, es un caos disfrazado de calma.
Cuba no busca agradar... pero termina dejando huellas. Solo muestra su ternura cuando cree que nadie lo ve. Solo baja la guardia cuando se siente verdaderamente visto. Y eso, en él, es casi un milagro..
Mientras el mundo observa con sospecha su cercanía, entre ellos crece algo más fuerte que cualquier tratado: una historia marcada por silencios incómodos, besos en pasillos secretos y heridas heredadas que ambos están dispuestos a romper. Pero... ¿puede el amor sobrevivir a la memoria de los imperios y las fronteras invisibles?