[¡El realmente no te merece!]
- gritaba internamente aquel doctor que con los ojos llenos de odio miraba a la doctora frente suyo -
¡Deja de tapar tus ojos con esa venda con la que te excusas de seguir con él!
-grito el Doctor a Cha quién solamente se quedaba callada con la cabeza mirando hacia el suelo con las lágrimas al borde de sus ojos -
¡Sabes que el te engaña y disfruta hacerlo en tu cara!; ¿cómo puedes seguir con alguien así?...
- De impotencia al no poder hacer nada, las lágrimas empezaron a recorrer el rostro de aquel caballero que miraba a la dama frente suyo -
⟨ Cha al reprimir todo lo que sentía por tantos años abofeteó al doctor quien no levantaba la mirada y tocaba su mejilla que fue golpeada ⟩
¡¿Crees que es fácil para mí estar con ese par, todos los días?!; no sabes lo que yo he tenido que soportar para poder seguir en mi pasantía.
- gritó la doctora con los ojos rojos de tanto llorar mirando a su acompañante en ese momento -
¡No puedo dejarlo!, es el padre de mis hijos y también mi esposo; si lo dejo estaré sola y mis hijos se quedarían sin su padre, además de que estoy muy vieja para que alguien me amé...
- tomo asiento en el suelo de aquella terraza del hospital recargando su espalda en frío concreto de pared juntando sus rodillas a su pecho, derramando lágrimas -
¡Yo te amo y tu no te das cuenta!...
- se acercó hacia la doctora colocándose en frente de ella e hincandose a su altura -
¿Pero qué dice?; nadie me amo cuando era adolescente, cree que ahora que soy más grande y que tengo dos hijos, ¿alguien me amé?; ¡jaja!, si que es gracioso profesor.
- río un poco limpiando con la manga de su bata las pocas lágrimas que salían de sus ojos, dirigiendo su mirada y atención al antes mencionado -
Yo nunca dije que fuera gracioso, ademas hay un dicho que dice: 'no hay edad para el amor'
- Tomo las manos de su contraria, la miro con una sonrisa calida -
...
¿Le corresponderá? ...