Naruto No Kuroi Uzumaki Noroi

En el mundo de los ninjas, hay un clan que es temido y respetado por su poder y su conocimiento. Es el clan Uzumaki, los maestros del fuinjutsu, el arte de los sellos. Pero lo que pocos saben es que este clan oculta un oscuro secreto: una maldición que se transmite de generación en generación, y que otorga un poder inmenso a costa de un gran sufrimiento.

La maldición se originó hace mucho tiempo, cuando un shinobi del clan Uzumaki encontró un pergamino con un jutsu prohibido. Era un jutsu que prometía darle una fuerza sobrehumana, pero que también tenía un alto precio. El shinobi, cegado por la ambición, decidió usar el jutsu en sí mismo, sin saber que estaba activando una maldición que cambiaría su destino y el de sus descendientes. El jutsu deformó su cuerpo y su chakra en forma de espiral, y se grabó en su ADN como una marca en forma de remolino.

La maldición se convirtió en un tabú y luego en una leyenda dentro del clan Uzumaki. Solo unos pocos nacían con el gen de la maldición, y solo unos pocos podían activarlo. Quienes lo hacían, obtenían una fuerza física y un chakra increíbles, pero también sufrían un dolor insoportable y una degeneración celular. Era un poder que solo se podía usar en situaciones extremas, y que podía acortar la vida del portador.

El clan Uzumaki fue atacado y destruido por otras aldeas que los temían y envidiaban. Algunos sobrevivientes se dispersaron por el mundo, llevando consigo la maldición dormida. Uno de ellos fue Naruto Uzumaki, el hijo de el cuarto Hokage y la jinchuriki del Kyubi. Naruto creció sin saber nada de su clan ni de su maldición, hasta que un día, en una misión peligrosa, sintió algo extraño en su espalda. Era una marca en forma de remolino, que empezaba a arder...