En las bulliciosas calles de Brooklyn, Rosie y Genevieve forjaron un vínculo inquebrantable como mejores amigas durante sus tumultuosos años de escuela secundaria. Pero oculto bajo la tranquila apariencia de Rosie, había un secreto que había enterrado profundamente en su corazón: estaba enamorada de Genevieve. El destino le negó la oportunidad de revelar sus sentimientos, y años después, cargada de arrepentimiento, Rosie decide escribir una carta sincera a Genevieve, sin esperar una respuesta.
Cuando llega una respuesta inesperada, el mundo de Rosie se da vuelta. Las dos mujeres se embarcan en un notable viaje de redescubrimiento a través del arte de la escritura de cartas. A medida que su correspondencia se desarrolla, se sumergen en los preciados recuerdos de su pasado compartido, avivando emociones y desentrañando las complejidades de su amistad.
Rosie, una vez una adolescente introvertida que luchaba con problemas de identidad, encuentra consuelo en la personalidad vivaz y franca de Genevieve. Genevieve, una intrépida revolucionaria, nunca dudó en expresar sus opiniones, incluso si eso significaba enfrentar críticas. Juntas, navegaron por los altibajos de la adolescencia, formando una conexión extraordinaria que desafiaba las normas sociales.
A través de sus sinceras cartas, Rosie y Genevieve enfrentan las elecciones que hicieron y los caminos que no tomaron.
Asher pensaba que tenía una vida perfecta. Era el mejor en su equipo de hockey, tenía las mejores notas en la universidad y un grupo de amigos que parecían serle fiel.
Pero cuando conoce a Skye, la hermana de uno de sus mejores amigos cree que la chica está loca. Tiene una actitud tan dura que es difícil de romper y suele irritarlo todo el tiempo desde que se ha mudado a vivir con su hermano y él.
Y cuando los chicos del equipo le proponen que no conseguiría conquistar a alguien como Skye, lo ve como un reto que está dispuesto a jugar, una apuesta para conquistar el corazón de alguien como Skye es suficiente para que Asher acepte, pues es demasiado competitivo y no está dispuesto a perder su puesto en el equipo de hockey y pasarse el resto del año en la banca como le han apostado.
Sin embargo, a medida que conoce a Skye, Asher se da cuenta que la chica es todo lo contrario a lo que le ha tratado de demostrar, conquistarla no parece tan complicado como pensaba y el corazón de ella no parece ser el único en juego.