La paz es larga en el Reino de la Meseta. Pero dar por hecho que es inquebrantable sería una temeridad. Los Guarfell han muerto, señores de Descanso del Rey, han muerto. Rica Linnepine es obligado, por orden del rey Carlo Rosemous, a abandonar su privilegiada ciudad para gobernar en la ciudad que antes pertenecía a los Guarfell. En su nuevo hogar, rodeado de mil ojos que miran y mil orejas que escuchan, Rica descubrirá la verdad que hará temblar los cimientos del reino. Y ambas familias, Rosemous y Linnepine, unidas por milenios de historia, se convertirán automáticamente en enemigos.