Mis enemigos quieren mi herencia.
Herencia que mi abuelo Albert Russo había dejado a su descendencia.
Un Legado Escarlata, una historia y un tesoro escondido que daría lugar a una guerra.
Sumergido en los secretos de mi pasado y de los de mi familia, no podía pensar en otra cosa más que en acabar con las mafias enemigas.
Porque yo era el líder, el boss de la mafia Escarlata.
Y aunque yo controlaba todo eso y más, mi corazón fue lo único que no pude controlar cuando la reconocí. Cuando la ví desde lejos y supe quien estaba detrás de esa ropa de camarera.
La misma chica de varios años atrás, cuando éramos pequeños y usábamos patéticos uniformes. Cuando la miraba desde lejos, sin poder siquiera acercarme, cuando ella fijaba sus preciosos ojos en mí y me sonreía a pesar de que yo no lo hacía.
La misma chica que hizo que mi corazón latiera más fuerte, y que ahora mismo daría mi vida por ella.
Porque ella es mía... y yo soy suyo.